La enorme diversidad de fauna en el bosque mediterráneo hace de este hide una experiencia divertida y imprevisible. La seguridad de contar con agua corriente todo el año, recurso muy limitante en esta zona entre los meses de junio y noviembre, permite disfrutar en este escondite de toda suerte de especies salvajes.

Encajonado en una vaguada, este hide nos permite inmortalizar la gran variedad de colores que presentan las aves forestales mientras escuchamos sus cantos, la banda sonora del bosque. A su vez, los linces son asiduos ya que, además del agua, perdíces y conejos encuentran en este punto un lugar habitual.

El hide es de panel sandwich, con cristales espía a dos alturas (una a ras de suelo, permitiendo al fotógrafo tumbarse para obtener mejores perspectivas) y tiene una capacidad para 5 personas. Además cuena con enchufes de luz y focos para la noche, permitiendo la posibilidad de fotografiar especies como el lirón careto o el buho real. También cuenta con WC químico en su interior.

Especies (a lo largo del año): Lince ibérico, ciervo, conejo, perdiz, rabilargo, urraca, pito real, pico picapinos, herrerillo común, gavilán, picogordo, trepador azul, herrerillo capuchino, acentos común, oropéndola, pinzón común, currucas, y toda suerte de fauna que se acerque a beber en este punto de agua.

Época del año: Todo el año

Capacidad; 5 personas

Tarifas por persona/día: 80 euros